Sin disparar, me quedé observando durante unos minutos, su expresividad, su naturalidad, su espontaneidad y sus risas contagiosas y continuas... Cuando se dieron cuenta de mi presencia, se acercaron a mí curiosas, preguntándome si trabajaba para la TV. La carcajada que solté, fue suficiente para que me hicieran partícipe de sus juegos y el sol que miraba la escena desde lejos, también quiso divertirse con nosotras, poniéndose a sus pies.
Sin disparar, me quedé observando durante unos minutos, su expresividad, su naturalidad, su espontaneidad y sus risas contagiosas y continuas...
ResponderEliminarCuando se dieron cuenta de mi presencia, se acercaron a mí curiosas, preguntándome si trabajaba para la TV.
La carcajada que solté, fue suficiente para que me hicieran partícipe de sus juegos y el sol que miraba la escena desde lejos, también quiso divertirse con nosotras, poniéndose a sus pies.